Le vendé el alma al diablo




Entonces alguien te abraza, y todos los añicos siguen estando igual de rotos, pero ahora están más juntos y vuelven a rozarse trozos que no debería haber separado nadie y no, claro que aún no estás bien, pero ya te imaginas como podría ser estarlo.

Comentarios

  1. qué necesidad de un abrazo de esos.

    ResponderEliminar
  2. De la necesidad nace la entrada en esta ocasión. Si me entero donde se consiguen, te aviso ;)

    ResponderEliminar
  3. Entonces alguien te abraza, todos tus cerrojos saltan y se desbordan los rios de tu mirada y si, los trozitos empiezan a juntarse.rozarse y... quizas... a juntarse

    ResponderEliminar

Publicar un comentario