Ahora, que sueño, me pregunto por qué eres tan caliente pero menos que mi boca. Después de todo, me pregunto tanto ahora por la parte que me toca... que el yerro de mi boca; entibiada por la falta de tu ropa; muere por el bombo del deseo, que te dije en un recreo, cuando tu coleta era tu coleta, y mi solfeo mi sol feo.
Vivo reflejo de la actualidad.
ResponderEliminarMagnífico.
Ahora, que sueño, me pregunto por qué eres tan caliente pero menos que mi boca.
ResponderEliminarDespués de todo, me pregunto tanto ahora por la parte que me toca... que el yerro de mi boca; entibiada por la falta de tu ropa; muere por el bombo del deseo, que te dije en un recreo, cuando tu coleta era tu coleta, y mi solfeo mi sol feo.